Hay tres cosas que no pueden faltar en un entrenador a la hora de hacer frente una temporada, y hablo de cosas fuera de lo que es ganar cada partido, ganar ligas y disfrutar con las victorias.
La verdad es que estos años he crecido a marchas forzadas, y puedo decir que he sobrevivido. La experiencia me ha hecho madurar y mejorar.
A estas alturas he visto de todo, y seguro que me queda mucho por ver.
Tengo claro que mi ambición personal se ha visto quebrada este año, pues mis aspiraciones encajaban con la clasificación en la tabla alta y dar de nuevo la sorpresa en la copa.
Debo seguir con ese empeño, pero para ello necesito 3 cosas básicas : Confianza de la directiva, oferta deportiva con solvencia, oferta económica.
La directiva del Manresa se ha dirigido a mí para asegurarme que confían en mi plenamente, y eso reactiva mis ganas de empezar la liga, y de confeccionar un equipo mejor aún.
Pero el segundo factor es igual de importante que el primero, mi opinión es que si las lesiones nos hubieran respetado este año estaríamos por debajo de los dos primeros, pero luchando con el grupo perseguidor. Es la linea a seguir y reforzar. Este bloque crece, solo hay que ver los registros de los que ahora tienen 20 años, se están convirtiendo en jugadores de nacional A, se están acomodando a la categoría. El próximo año lo intentaremos con Adri y Calle. Los jugadores expertos no se puede decir que sean los típicos veteranos, son jugadores que ahora cumplirán una edad madura de 24 o 25 años.
Necesitamos dos o tres ajustes muy concretos, y espero que lleguen. Hay jugadores que apenas han jugado una vuelta, o se han perdido un tercio de liga, Marco por ejemplo no ha jugado ni 5 partidos, y Carlos por fuerza mayor se ha perdido media liga. Son como fichajes nuevos.
Confío en que los ajustes lleguen, eso dará al grupo seguridad, y también competitividad.
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